Dios desea el crecimiento de la iglesia
de su pueblo, del cuerpo de Cristo acá en la tierra y Él esta obrando continuamente para que esto suceda.
¿Hay aspectos que necesitamos revisar como iglesia cuando falta este crecimiento? ¿Cuánto tiempo hace que no celebran bautismos en su iglesia integrando a nuevos hijos de Dios?
Dios espera nuestros frutos como hijos suyos y esta haciendo siempre su parte para que participemos en la tarea que nos encomendó. La tarea es de todos y cada uno (empezando desde los pastores y líderes) debemos revisar y buscar en la comunión con Dios la guía para estar haciendo lo que Él espera de nosotros.
Quizás necesitemos que Dios cave alrededor nuestro, profundizar nuestras raíces y nutrirnos más de su Palabra (Lucas 13:8) para volver a estar firmes y fuertes para dar fruto.
Porque Dios sigue obrando poderosamente a nuestro alrededor y espera que cada uno haga su parte para ver los frutos. Cuando nos enfocamos en priorizar las tareas que Dios nos manda participamos en la alegría de ver los frutos.
El crecimiento de la iglesia nos involucra a todos
y Dios en su grandeza nos da este privilegio de ser parte, de ser instrumentos para ver vidas cambiadas por su amor y poder.
El crecimiento de la iglesia no tiene que ver con llamar la atención
tiene que ver con la transformación de muerte a vida de las personas y es la tarea más importante en la cual podemos invertir nuestro tiempo, capacidades y recursos. ¿Cuánto tiempo hace que no ves una vida transformada al lado tuyo por el poder de Dios?
Dios nos bendiga y nos permita ver que nuestra vida en las manos de Dios colabora para que otros tengan vida.